No quiero saber quién fue, si no por qué.
¿En que cambiaría saber si la culpa la tuve yo, la tuviste vos o la tuvimos los dos? Las cosas llegaron a este punto y no se van a solucionar sabiendo si fuiste vos o fui yo. Pero si hay que buscar culpables, en mi opinión fuimos los dos... ¿Por qué? Fácil...
Sos culpable por tus ojos marrones que me miraban hasta el alma, por tu lunar, por tu sonrisa provocativa, por abrazarme así. Te declaro culpable por cada vez que me sacaste una sonrisa con cada 'te amo', cada 'sos hermosa', incluso con ese '¿Sabías que te amo y que si me dejas o pasa algo me muero?'.
Sos totalmente culpable de marcarme la piel con cada beso, con cada caricia, sos culpable de cada sonrisa, tenes la culpa de cada sueño, de cada mirada, de cada merienda, de cada noche y día, de cada sensación, sos total y puramente culpable.
Y en lo que ami concierne soy culpable de amarte hasta un punto in-imaginado, de pensar en vos sin escrúpulos, de vivirte, de encontrarte, de perderme, de enamorarme así de vos. Tengo la culpa absoluta de querer verte reír a cada instante, de intentar mudarme a tu abrazo, de pretender llevar siempre tu olor conmigo, soy culpable, total y puramente culpable.
Y ambos, juntos, los dos, somos culpables de habernos lastimado, de habernos amado, de pelearnos y de hacernos tan bien, somos culpables de los secretos, de las sonrisas, de las provocaciones, de las idas y vueltas, de decir de mas y de callarnos. Somos orgullosamente culpables de habernos enamorado, amado, peleado y perdido. Somos totales y puramente culpables.
Pero al analizar las culpas por separado y las culpas compartidas sigo llegando a una conclusión meramente sencilla. Las cosas siguen estando como están, en nada cambia saber quién tuvo la culpa si no sabemos por qué las cosas están así.
Por eso, no me gusta hablar de culpas, pero si hay algo de lo que hacerme cargo, lo voy a admitir, es cierto. Me declaro culpable.
Jouper.-
