miércoles, 15 de abril de 2015

Entendió que el 'para siempre', siempre se termina

No siempre es fácil dejar el pasado atrás, muchas veces los sentimientos y los recuerdos nos tienen fuertemente atados a lo ya vivido.
Es una carga contante que llevamos con nosotros, como una gran piedra que muchas veces nos hace volver a tropezar. Tratamos de desatarnos de este peso pero al mirarlo, nos llenamos una vez mas de los recuerdos mas lindo que pudimos pasar en esa época y afloran en nosotros los sentimientos como una absurda embriaguez que enamora; y caemos una vez mas en no soltarlos, en llevar el doloroso peso cargando con nosotros.
El duelo dura un determinado tiempo, a veces es mucho tiempo, a veces es poco, todo dependiendo de la situación vivida, de cuanto tiempo duró, de cuanto nos marcó, de que recuerdos dejó a su paso, de cuan grande fue la herida, de qué nos hizo sentir; es casi matemático ¿no?, las posibilidades son infinitas.
Este duelo, según la psicología es un duelo necesario y consta de 4 etapas.
Etapa 1 - Entumecimiento de la sensibilidad: La persona se siente aturdida e incapaz de reaccionar.
Etapa 2 - Búsqueda: La persona no acepta la pérdida, se intenta restablecer el vínculo roto.
Etapa 3 - Transición: Se comienza a aceptar la pérdida, aparecen la depresión y el realismo.
Etapa 4 - Reorganización: Se renuncia a la esperanza y la persona se ve nuevamente motivada a seguir adelante.
Me toco pasar por as tres primeras en un lapso de ocho meses, repitiendo 1, 2, 3, 2, 3, 2, 3 y así, pero hoy ya es hora, ya no puedo pos-ponerlo más, porque el tiempo ya fue el suficiente y porque no puedo seguir haciéndome esto a mi.
 Es momento de tirar todo por la borda, de desatarme este peso, de dejar de volver al mismo lugar, es momento de levantar la cabeza y seguir adelante, de caminar hacia adelante y solo adelante, no volver sobre mis pasos, ya no más.
Desato cuidadosamente este peso y lo mando a volar, a partir de hoy soy otra vez libre, puedo volar otra vez, ya nada me mantiene cautiva, la fuerza se hace sentir otra vez.
No puedo borrar los recuerdos que llevo en el pecho, pero elijo no volver sobre ellos, si no aprender de un tiempo pasado, mientras que ese tiempo se quede justamente ahí y no me siga esta vez.



Quiso caminar y sacó de su mochila todo el karma, 
el camino se llenó todo de barro,los zapatos le pesaban como anclas,
 pero tuvo condición para no hundirse nunca.

Jouper.-

martes, 14 de abril de 2015

Un año de poema

Vi en él, su campera roja.
Vi en sus ojos, profundidad.
Vi en su pelo, una noche oscura.
Vi en su boca, fragilidad.

Vi en su sonrisa, la luz del mundo.
Vi esa chispa en su mirar.
Sentí sus dedos sobre mi espalda,
y me entregué a su voluntad.

No lo escuché al cerrar la puerta,
ni cuando comenzó a apagarse su voz.
Solo sentí un enorme vacío,
cuando ya no sentí su calor.

Ya pasó un año desde el primer beso,
y lo recuerdo como si fuese hoy.
Dijo un 'te quiero' muy despacito,
y con su suave voz me acarició.

Un año desde aquel día,
que tanto en mi vida marcó.
Me pintó un mundo nuevo,
y mi corazón no lo olvidó.

Hoy ya no te tengo
y nunca te volveré a tener.
Pero la luna me insiste en ser fuerte,
y yo, así lo haré.

Te voy a llevar en el recuerdo,
muchas veces sintiéndote en mi piel,
pero sabiendo que nunca me amaste,
como yo a ti te amé.

Jouper.-

martes, 7 de abril de 2015

Carta a una señorita especial

Hoy, después de 4 años, volví a pisar una academia (porque nunca se deja de bailar, se deja de ir a entrenar)
Tuve mi primer clase de Jazz como alumna de la academia Soria Arch, en donde me recivieron muy muy bien y mas aun sabiendo de donde vengo. Me sentí orgullosa diciendo que fui tu alumna y todavía se me llenan los ojos de lágrimas. Tengo una sensación muy linda con lo que viví hoy, porque siendote sincera, tenia mucho miedo de volver, no por la danza, ni por haber perdido estado o no acordarme, si no por el ambiente y la gente. Cuando antes fui a otra académica, fue lindo volver a bailar pero lo penoso que era estar en una clase con esa profe, todo tan frío y distante, le sacaba toda la emoción. Por algo dejé de ir.
Tu academia siempre fue un refugio prácticamente mágico para mi, en donde todo estaba bien, en donde te olvidabas de las nubes negras que te atormentaban y podías descargar tantas penas y presiones, era un refugio cálido y seguro, con una pequeña familia que siempre te recibía con los brazos abiertos.
Te agradezco el haberme cultivado en este arte tan hermoso, llenador y puro, pleno de pasión y causante de una gran satisfacción. Gracias por ser una persona tan amorosa y cálida, tan mamá de todas nosotras, nos llenaste de tanto que a ninguna se nos olvida.
El ultimo festival que baile fue todo en tu recuerdo, como una especie de atributo, Mili y yo sentíamos toda la presion encima de lo mal que nos sentíamos en ese lugar, sin embargo esa última vez que subí al escenario me prometí bailar como me enseñaste, disfrutando de lo que estaba haciendo, dando todo, siendo yo y, obviamente, sonriendo siempre.
Las lágrimas no faltaron durante las coreografías y sin duda fueron lágrimas de agradecimiento y nostalgia.
Puede que la vida nos lleve por muchísimos caminos, pero uno nunca olvida de donde viene, cual fue su origen y a vos siempre te voy a recordar, como la seño que me recibió ese primer día en el jardín de mi cole, como quien me enseño las técnicas para bailar y también a bailar con el corazón, con el alma y dando la vida. Como la profe alterada que gritaba y corría antes de un festival porque algo salia improlijo y los trajes jamas estaban a tiempo. Como esa mujer que te hacia sentir una inmensa seguridad al momento de rendir un examen, de salir a escena en un festival y de dar todo de vos en una competencia. Siempre te voy a recordar por la llamita que encendiste adentro mio, hoy un fuego ardiente que nunca para de crecer, por inculcarme este amor por lo que hago y disfrutar y por enseñarme a no rendirme, a no bajar los brazos, a sonreír siempre aunque algo saliera mal, porque con todo esto no me enseñaste solo a bailar y actuar sobre un escenario, no solo aprendí a dar un buen show, porque todo esto no solo se queda en un teatro, son esas enseñanzas que me acompañan todos los días y me ayudan a ser yo, a seguir adelante, a querer seguir creciendo y superándome, a dar lo mejor de mi y a no dejar de ser feliz.
Gracias Caro por tanto que me diste, espero devolvertelo siendo una persona de bien y esforzandome en siempre ser una buena bailarina, transmitiendo tus enseñanzas y siempre siempre sonriendo.
Te llevo guardada siempre en mi corazón y en mis mas lindos recuerdos. Gracias por absolutamente todo. Te quiero muchísisimo!, miles de besos!.-
Tu siempre alumna.-
Jouper.-