domingo, 23 de noviembre de 2014

Momento de debilidad

Realmente te amé. De verdad te amaba, lo sentía adentro, te llevaba adentro, eras parte de mi, una muy importante en mi historia y siempre vas a serlo. Me gustaba trazar mi camino entrelazado al tuyo y caminar por él de la mano, por mas de que a vos no te gustaba que te tomara de ella.
Disfrutaba de cada segundo en el que podía mirarte, me dejaba sin sentidos tu mirada, tus ojos profundos, tu intensidad. Esos ojos, esa mirada, mierda, como me gustaba eso de vos, me dejaba absolutamente vulnerable.
Amé con locura cada centímetro de tu piel, de tu cuerpo, cada caricia, cada beso, mirada, te tenía en un altar, totalmente idealizado, atribuyéndote mucho más de lo que eras, poniendo cosas de más y contrarrestando lo que no me gustaba pero si eras, presionándote por no ser lo que yo creía que eras.
Joder, que no daría por besarte ahora.
Se que esto es sólo un momento de debilidad, totalmente superable, al igual que los demás que he tenido, lo que siempre me atormentó es el hecho de no saber que haría si me diera un momento de debilidad contigo justo en frente, ahí mismo, es reconfortante al mismo tiempo el saber que no te acercarias a mi, porque si no sería bastante difícil no perder el control.
Soy fuerte y es solo un momento de debilidad.-
                      Jouper.-

miércoles, 19 de noviembre de 2014

Vaya Vida

Tengo 2 años y medio, junto bichos bolitas con Santiago en el patio de la guardería Pisa Pisuela, los ponemos todos en un camioncito de juguete y los llevamos a pasear.
Tengo 3 años y me intento afeitar como papá, consigo sacarme toda la piel del labio de abajo con una guillete mientras me baño, al otro día voy al jardín con un parche en la boca.
Tengo 5 y lloro sentada en mi cama porque no entiendo porque no vive mas en casa mi papá, hace 3 años se fue y no se si volverá, mamá me dice que por separado me siguen queriendo los dos igual.
Tengo 7 años, una pollera negra, una trusa roja, polainas y zapatillas de danza, estoy aprobando con 10 mi primer examen oral del profesorado de jazz, mi mamá me compra papas fritas.
Tengo 9, nace mi hermana, la toco despacito, me da miedo de que se rompa, papá me ayuda a alzarla y por primera vez siento lo que es el amor.
Tengo 10 años, nace mi otro hermano, descubro que me gusta jugar a ser mamá.
Tengo 12, empiezo la secundaria, nace mi hermanito mas chico, no me gusta que se llame Gino Lionel, porque no me gusta Messi, yo quería que se llamara Gino Valentino.
Tengo 14, conozco la amistad entre el hombre y la mujer, mi mejor amigo y yo somos los mas revoltosos de la clase, terminamos con 13 amonestaciones el año.
Tengo 16 años, la vida me enseña que tengo hermanas de sangre que no son hijas de mis padres, somos hermanas ante todo, desde ayer, por hoy y para siempre.
Tengo 17 años, mañana tengo prueba de matemáticas, en un mes es mi cumpleaños y no quiero tener 18, y acá estoy, dale loca, deci algo de quien sos.-

A mi dios inspirador, DS.-
Jouper.-

domingo, 2 de noviembre de 2014

Recordando olvidar

Es tan difícil perder a una persona a la que amas, tan complicado acostumbrarte a la idea de que ya no va a estar a tu lado...
Tenes esas ganas adentro tuyo, esas ganas fervorosas de querer gritar, romper todo. Lloras, lloras mucho, lloras fuerte, intenso. Las lágrimas te bañan, intentan limpiarte vanamente la tristeza, te estas marchitando, se te apaga la luz, aunque llores, tus ojos ya no brillan, se ven opacos, perdieron su brillo natural.
Tus brazos sienten las desesperadas ganas de estar envueltos a la tibieza de ese cuerpo que, aunque ajeno, estaba tan lleno de vos hasta hace poco. 
Tu garganta ni siquiera puede hablar porque tiene atragantadas tantas cosas. Te extraño, te amo, te necesito, volvé, ¿porque te fuiste?, no me dejes, no me sueltes, no te vayas, por favor, solo te pido un día mas, te amo, te extraño, te necesito, volvé.
De pronto te encontrase sumido en una vasta monotonía gris, un sin fronteras oscuro, ¿cómo salís?, solo el tiempo puede curarte el alma, solo el tiempo intentará sanar ese trocito de terciopelo ajado que haces llamar tu corazón. La herida puede cerrarse pero la marca siempre va a quedar y no importa cuanto lo intentes, el olvido es una fantasía, siempre llevaras en ti el recuerdo que, algunos días te traerá una feliz melancolía y otros días te hará llorar, pero que siempre siempre se va a quedar.-
                                             Jouper.-