lunes, 29 de agosto de 2016

He aquí otro poquito de mí.

Me gusta la persona en la que me convertí.
Simplemente disfruto de tener mis mil y un fases, como la Luna.
Me gusta tener un estilo total y completamente indefinido para vestirme y elegir uno distinto cada día. Soy feliz siendo amante de esos pequeños detalles que me llenan la vida, el café, la Luna, los libros, mi cama, el calor del solcito, ver una linda imagen por la calle.
Me convertí en una pequeña escritora principiante que se graba a las 2 de la mañana para acordarse al otro día del tema que se le ocurrió para escribir, también me grabo cantando, más bien me graba mi mejor amigo que ahora es una especie de manager. Me convertí en un cúmulo de energía que se ríe a carcajadas, canta y baila en medio de la calle y trata de contagiar eso, todo sería muy bello si la calle fuera una especie de escenario para los caminantes, artistas.
Muchas veces ni me reconozco, también soy como el reflejo del espejo, que se ve igual a mi pero no es propiamente yo. Soy muchas cosas, no soy muchas otras, soy sentimientos, emociones y unos ojos grandes, claramente para que quien los mire no tenga nada que descifrar, pues hablan por sí solos.
Soy mis estados emocionales repercutiendo en mi pobre pelo que a pasado por multiples cortes y colores, Soy los dibujitos de mis uñas y de mis cuadernos, soy los 80 cuadernos que compro y no uso porque ya tengo tantos que ni sé en que usarlos pero los amo porque son hermosos.
Soy flores y sonrisas, si, si, las sonrisas galletitas, esas que amo, por que son risas.
soy también la que repite mil veces mi tan famoso 'te quiero y quiero té' porque no deja de parecerme una frase hermosa y divertida.
Soy novelas a medio leer, soy novelas a medio escribir, soy ideas de novelas que no me siento a escribir porque la faculta, la vida, los amigos y alguna actividad física también.
Soy la del grupo misionero que tiene varias dudas con la biblia.
Soy mis labiales morados, mi piercing falso de la nariz, mis charlas interminables con mis amigas, mis mates y mis listitas de 'cosas para hacer', que rara vez terminan con todos los puntos hechos.
Ahora también soy un poco menos nocturna, por que la rutina me lo impide, pero ni bien se acaban los días de responsabilidades no hay nada que disfrute más, que volver a ser compañera de la Luna.
Me gusta mutar, ser, sentir, cambiar, pasar por mis fases, conocerlas y reconocerlas, transformarlas.
Quizás este siendo optimista, este es uno de mis buenos momentos, tengo mis bajones, si señor, en estos momentos no soy la personas con mayor estabilidad emocional, pero... ¿quién la tiene?.
Me gusta esto, no lo sé, me gusta sentirme autentica y fiel conmigo, crearme y reinventarme.
Vine a este mundo a escribir una historia sobre una persona que vivió una vida, por eso disfruto de transformar a este personaje que no es nada más ni nada menos que yo misma. A los lectores, a los observadores, a quienes compartan mi vida conmigo, disfruten del show y ojalá les guste la historia, mi historia.

martes, 23 de agosto de 2016

Amigo, tengo miedo.

Amigo, la necesito.
No puedo creer que no este, tengo miedo.
Miedo de todo. De olvidarme de su voz, de sus expresiones, de sus formas.
Miedo de no salir adelante, de no poder, miedo de no saber cómo sin ella.
Me preocupa y me duele no sentir tan intenso su olor, en su casa, en su ropa, en sus cosas.
Amigo, duele.
Es como si no alcanzara el dolor para dolerte, como si el llanto y los sollozos no fueran suficientes. Es de esos dolores que te consumen, que te quitan vida. Una agonía, eso.
La necesito.
Duele. Desgarra. Quita.
Gana.
Tengo miedo.-

Macarena.-