martes, 17 de marzo de 2015

Nublada

Nunca me gusto sentir esa mochila en la espalda, ese peso que te encorva y te hace chiquita, que te hace flaquear y los músculos blanditos, tiemblan. Para sacar ese peso feo primero hay que agacharse, hacerse una bolita, después empezar de a poquito y en voz bien baja a hablar, con vos mismo, con tu conciencia o con tu amigo invisible. Y de a lagrimitas empezar a llorar, vas a ver que el peso se va saliendo y te vas levantando, irguiendo, después lloras fuerte, a moco tendido y te haces mas grande y juntas mas fuerzas para llorar. Después te acostas en la cama y le pedís a mamá que te acaricie el pelo. Mejor si dormis, porque la tormenta se acaba de apagar, pero lo mas feo, es esa nube gris humo que te queda en el pecho y te tiene cansada y oscura.
Esa nube que parece conciencia de fumador viejo, te pesa en el pecho, te complica la respiración, te agota, te cansa, te agita.
Siento que hay pronóstico de duda adentro mio, esta parcialmente nublado el corazón y se estiman posibles llantos en cualquier momento del día.
Pero tranquilo, no desesperes, acordate de que por mas que llueva el sol vuelve a salir, entonces si hoy estas nublado, espera a que te vengan a iluminar el alma, con un oído que te escuche, con un beso en la frente o con una mirada de comprensión. Pero espera, no todo esta perdido.-
Jouper.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario