miércoles, 5 de marzo de 2014

Doro y quiepue

Se que cuando empiece este nuevo ciclo lectivo junto a él va a empezar un largo camino con muchos obstáculos que superar, la mayoría a nivel personal.
Hace 3 años, por cuestiones familiares, perdí la oportunidad de seguir junto a mis compañeros de curso desde hacía 11 años y repetí el año en el que estaba. Como pueden adivinar fue complicado, duro y doloroso, no es fácil separarse de personas con las que compartís tu vida hace tanto tiempo. Todo el mundo me dijo que ahora aprendiera del error y que me sirviera para crecer, que me enfoque en terminar el cole bien y que no repita esto de nuevo.
Realmente no lo hice el primer año, ni siquiera quise integrarme al curso en el que ahora estaba, pero luego de un tiempo, de pensar, de meditar y de hacer un mea-culpa entendí que no perdí a mis amigos, ellos seguían estando ahí, cada mañana, pero de forma diferente y tome la decisión de aprovechar este tropiezo para mejorar como estudiante y para hacer amigos, debo reconocer que al año siguiente me integre mas que bien en el curso y mis calificaciones subieron como nunca. Al finalizar ese ciclo me sentía orgullosa de mi misma por haber crecido tanto a nivel personal como intelectual.
Lo que viene ahora es un poco mas duro, mis compañeros de toda la vida van a cursar su último año mientras yo curso mi penúltimo año. Mi mayor temor es el no poder soportar verlos día a día con sus buzos, remeras y banderas, cantando y festejando que ya se van mientras dentro de mi sé que no estoy con ellos por culpa mía. Este sentimiento era algo nuevo en mi interior y, a decir verdad, me trajo mucha angustia y tristeza que me cuesta controlar. Hoy, hace unos instantes, tuve un momento de debilidad en el cual las lagrimas brotaron de mi sin control alguno. Realmente me preocupaba el que me fuera a sentir así cada día. Gracias a este brote descubrí algo muy importante, primero, quienes son las personas a las que realmente les importo, mis verdaderos amigos, los que me preguntaron que me pasaba, porque me sentía mal y me aconsejaron al respecto y en segundo lugar, y gracias a ellos, entendí que las cosas pasan por algo y que, como me dijo un amigo, yo seguí, peleé y no deje el colegio, mejoré, crecí, maduré, siempre pensando que tropezón no es caída. Me sentí muy bien al saber que éste amigo estaba orgulloso de haber visto este crecimiento en mi y que a pesar de no compartir el mismo curso en el colegio, seguí estando presente para ayudarme, aconsejarme y mimarme un poco. También me lleno de satisfacción que un amigo, con el cual comparto mucho a pesar de conocernos hace tan poco, me dijera que yo soy mucho mas fuerte de lo que creo y que supere muchas cosas que comparadas con esta son pavadas. Por supuesto no hace falta ni decir que mis mejores amigas, mis hermanas, estuvieron ahí calmándome y escuchándome como siempre lo están.
Lamentable mi familia no sabe entenderme porque no han pasado por nada que se le parezca como para sentir el 1% de lo que siento dentro. Lo que saco en claro de todo esto es que si, va a ser un año difícil, pero esta en mi dejar que el año me gane a mi, o ganarle yo al año. Decido sin duda ganarle al año, demostrar que puedo, que soy fuerte. Cómo? Viviendo un día a la vez, superando un día a la vez, sin pensar si mañana o ayer fueron o serán mas difíciles que el hoy. Confiando en mi, en lo que soy, en lo que quiero y en lo que puedo ser. Y, claro esta, sin duda alguna, aferrándome a mis amigos, a esas personitas que siempre están a mi lado alentándome a seguir, a superarme, a ser mas, diciéndome que confíe en mi, que puedo hacerlo y que si tropiezo me van a levantar. Sé que mañana empieza un gran desafío, pero también sé que si quiero y puedo lo voy a lograr, es fácil, un paso a la vez. ''Doro y quiepue''

M*******.-

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